¿Qué entendemos por mentira infantil?

La mentira en la infancia no siempre es malintencionada. Puede ser una forma de protegerse, de experimentar con lo imaginario o de evitar consecuencias. Es importante diferenciar entre etapas evolutivas y conductas persistentes.
Mentir según la edad: ¿normal o preocupante?
- Entre los 3 y 5 años: Es común confundir fantasía con realidad.
- Entre los 6 y 9 años: Aparecen mentiras “sociales” o para evitar castigos.
- Desde los 10 años: Hay más conciencia de intención y consecuencias.
El desarrollo cognitivo permite comprender la verdad progresivamente.
Motivos frecuentes por los que los niños mienten
- Miedo al castigo o a decepcionar.
- Deseo de ser aceptado o admirado.
- Imitación de conductas adultas.
- Dificultad para reconocer errores.
- Juego simbólico o fantasía.
¿Cómo responder ante una mentira?
- Evitar reacciones desmedidas o humillaciones.
- Promover el diálogo sobre lo ocurrido.
- Reforzar la importancia de la confianza.
- Modelar con el ejemplo: la sinceridad también se aprende mirando.
Lo que debemos evitar como adultos
- Castigos severos que refuercen el miedo.
- Etiquetas como “mentiroso” que dañen la autoestima.
- Demandas de sinceridad sin apertura emocional.
La confianza se construye desde el vínculo, no desde el control.
¿Cuándo consultar a un profesional?
Si la mentira se vuelve una conducta repetitiva, con consecuencias negativas para el niño o su entorno, puede estar indicando otras dificultades emocionales o vinculares. Una intervención a tiempo puede ayudar a resignificar estas conductas.
Siempre es recomendable consultar a un profesional ante cualquier duda. Comprender es el primer paso para acompañar.